Go figure
A decir verdad, un cuerpo necesita un lenguaje auténtico, propio, que dibuje su vocabulario a partir de la propia diversidad.
Shmuel y Tomer se encuentran en un palco. Shmuel se familiariza con su diversidad, observa sus movimientos, aprende a reconocerse.
Y en esta desigualdad define sus acciones, las modela, las baila y transforma su movimiento en un puente que ofrece a Tomer como una invitación al diálogo.
En el deseo mutuo de ser belleza, de ser verdad.
